Era algo esperado. El debate entre Pizarro y Solbes. En cuestión de escenario todo impecable. Pero en la imagen, Pizarro tuvo dos puntos débiles. El primer punto débil fue su inmovilismo. Rígido, agarrado al atril, mirando fíjamente a Solbes, gesto adusto. El segundo fue su constante tendencia a la lectura del papel amarillento.
Solbes, en cuanto imagen estuvo bravísimo. Tiene un ojo cerrado saecula saeculorum, pero acertaron al colocarle el ojo bueno del lado de la cámara. Manejó muy bien el lenguaje corporal. Impresionante su "rito budista" (manos juntas a la altura de la boca, como recogiendo la energía, la concentración y "onda vital"). Pizarro fue barrido por Solbes. Si bien es cierto que Pizarro fue ganando poco a poco desde el principio.
Fue un debate entre caballeros. El más caballeroso Solbes, pues Pizarro, cuando intentó dejar de serlo no supo. Sus "demagogias" sonaron artificiales e impropias de un tipo que sabe que la demagogia se cae con los "hard data" que Solbes le recordó a Pizarro con la sonrisa cómplice de éste. Pizarro sabía de sobra que los tres recortes (ministerio de vivienda, financiación ANV y reforma de Bermejo) que propuso se caían por su propio peso.
Ambos demostraron al país, y especialmente a los asesores políticos, que se puede salir al debate con más papeles que una biblia. Estos dos políticos manejaron tablas, gráficas, noticias, papelinos y hasta postits sin dar sensación de desorden. El momento cumbre de los papeles fue cuando Solbes sacó la supuesta noticia donde se recogía que Pizarro pretendía un sistema de pensiones privado. Ahí quizás debió intervenir Matias Prats, porque Solbes interrumpió a Pizarro, pero bueno... La negativa de Pizarro sonó sincera, pero no se lo esperaba.
Solbes supo manejar muy bien las pullas. Las dirigió contra los asesores de Pizarro, que esas van para todo el partido y demuestran que no hay equipo y las dirigió contra Pizarro. "Parece mentira que todo un abogado del estado como usted no sepa que la UE..." (inversión I+D+i), "Creo que no le han asesorado bien u oculta los datos que no le interesan" (Sobre los datos del CIS en cuanto a la confianza de los españoles).
Solbes se centró en los datos y Pizarro en una réplica se apoyó en la opinión del CIS. Este hecho produjo que Solbes tuviera la oportunidad de machacar a Pizarro. Y lo hizo. Porque Solbes se bajó a ese mismo nivel y le recordó que la opinión respecto a uno mismo era mucho mejor que la opinión respecto a los demás. Y es cierto, todo el mundo dice que el paro es el principal problema, pero la mayoría tiene empleo (por poner un ejemplo).
¿Dónde pudo Pizarro ganar el debate o recuperar algo?
Solbes le dio una oportunidad a Pizarro. En el último turno, Pizarro sacó el tema de la energía, una de las causas que expuso Solbes que hacen que nosotros tengamos una inflación más elevada (dependencia energética, ya saben). Solbes dijo que dejaba el tema de la energía para su último turno. Pizarro no estuvo atento o se le olvidó, pero Solbes no hizo mención alguna a la energía en su último turno. Pizarro debería haber aprovechado en los dos últimos minutos resumen para exigirle una respuesta. No le hubiera consumido más de 15 segundos y le hubiera robado los dos últimos minutos a Solbes. Por otro lado, mal planteado, en mi opinión, el hecho de que los dos minutos de resumen los aprovecharan para "hablar de leído" un discurso breve sobre la política económica de su partido y no sobre el debate.
En resumen, Solbes mucho más ordenado, con muchos más datos, con mucha más experiencia, con mejor imagen pese al ojo. Pizarro empezó muy mal, muy técnico, con cierto tartamudeo y cayó en la demagogia. solbes mantuvo su línea de realismo, caiga quien caiga.
Personalmente, no soy socialista, tampoco pepero (pese a lo que piensen los socialistas), mi voto ya está decidido, pero como "persona humana" que soy he de reconocer y es justo decirlo que Solbes ganó el debate. Sin embargo, lo ganó Solbes, pues su único defecto en mi opinión, fue que no metió demasiado al partido. Él fue él, no el partido.
El debate entre Pizarro y Solbes fue posterior a la entrevista de Piqueras a Zapatero. Sinceramente, Rajoy me sorprendió positivamente el otro día y Zapatero me decepcionó con sus respuestas largas y divagaciones. Por supuesto, sobró la gracieta de "con la Iglesia hemos topao".
Sigo pensando...
Punto y (quizá) aparte
Hace 2 meses
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