sábado, junio 20, 2009

Krunch, fallo de previsión

El restaurante Krunch abre un nuevo local en Oviedo. Lo hace en la calle Suárez de la Riva. Para que la gente, esa gran desinformada, se entere de la próxima apertura del restaurante temático Krunch, hace una campaña de buzoneo o mailing o marketing directo. Vamos, que te mete un papel en el buzón.
El papelín en cuestión es un descuento para que te acerques y los conozcas. En el papel no pone fecha de apertura, por lo que como inocente y débil consumidor te acercas hasta la calle un día que sale el sol en Oviedo (y no son muchos últimamente).
Cuál es tu sorpresa al ver que el local de Krunch ¡está en obras todavía!
Todo un chasco, toda una falta de cabeza. Desconozco la eficacia del buzoneo, pero... hacerlo antes de abrir, sin informar de la fecha de apertura, me parece un error de los gordos.

----------------------------------------------------------------
¿Cuánto creen en Krunch que dura una octavilla de papel en un hogar?
Entre 0 y nada.
----------------------------------------------------------------
Sigo pensando...

4 comentarios:

Petri dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Petri dijo...

Una idea nefasta.
yo compro el material de oficina a una papeleria, en navidades me regalaron una especie de cajita para meter posit con el nombre de la empresa y la dirección, y me di cuenta que no llevaba teléfono, algo imprescinble y mas cuando haces estos regalos.

Anónimo dijo...

Hola, el nuevo local de Krunch en Suárez de la Riva 3, está abierto ya desde el viernes 19.

Jesús Sarmiento dijo...

Gracias, anónimo por tu apunte! Me pasaré entonces a ver qué es eso de Krunch.
Lo cierto es que el sábado 20 escribí la nota, pero la anécdota es del domingo anterior. Reconozco que debería haber puesto fechas para evitar confusiones posteriores. Gracias de nuevo por el dato.
Gracias, Montse, en este tipo de pequeñas campañas los descuidos pueden resultar muy importantes. En este caso se adelantó demasiado el mailing, pero lo de no poner el teléfono... ¡cachis!