Camino de perfección. Sí. El iaido, al igual que el toreo de salón, es un arte que se ejecuta en soledad y consiste en alcanzar la perfección, sea en el manejo de la espada, sea con el capote. Lograr reducir los movimientos necesarios para dar muerte a tu adversario es camino de perfección. Sistematizar el ataque para ganar rapidez es camino de perfección.
El protocolo, para mí, es un arte, un camino de perfección. Están las relaciones sociales y luego está el protocolo. Esta la batalla y luego está el iaido.
El protocolo no es caprichoso. Es fruto de la experiencia y tiene como objetivo que las relaciones sociales fluyan, los orgullos y egos no confronten, se agilicen las ceremonias y el tiempo se optimice. El protocolo es el arte de hacer que una relación social, un acto de muchas y variadas personas concluya sin que ninguna de ellas recurra al iaido o se marche herido en su orgullo.
Personalmente, incumplir el protocolo es como escupir en nuestro acervo. Porque el protocolo es el camino de perfección social, es la elegancia y el orden. Sin protocolo no hay humanidad, civilización, sólo primitivismo.
Sigo pensando...
Punto y (quizá) aparte
Hace 2 meses
2 comentarios:
Pues fíjate que en mis tiempos mozos practiqué iaido (el camino de la espada) y kendo...qué cosas.
Pues estoy contigo aunque no hayas dado nombres, porque se de lo que hablas..jeje.
Yo lo que creo es que hay mucha tontería ya alrededor. Y que las cosas bien hechas, bien parecen. Digo yo que si hay que cambiar algo y se está en el poder (perdón, se puede), pues se cambia. Pero mientras esté ahí, pues a cumplirlas como todos. Porque...¿no hemos quedado en que somos todos iguales?
Y por otro lado, si es por montar jaleo, pues vamos a montarlo, con lo que sea...aunque tampoco es para tanto, si por ejemplo se va a un acto de gala (digo por ejemplo) en chandal, pues queda mal, pero si somos iguales, iguales, iguales, pues un smoking es también gala, lo lleve quien lo lleve (aunque en ese caso, la gala es de noche, y siendo de día, lo que procede es el Chaqué)
Josú que demodé que soy.....
Casualidad. Hace poco vi algo sobre el iaido y me pareció impresionante. Ayer, viendo lo sucedido, se asoció en mi cabeza la idea del camino de perfección y lo asocié al protocolo un arte que para mí es tan antiguo como el beber. Algo tan básico y necesario que quebrantarlo es generar malestar, polémica y convertirse en centro de atención.
Las normas dicen que están para saltárselas, no. Están para cumplirlas o cambiarlas, nunca para saltárselas. Explicaciones posteriores de si era galgo o podenco se caen con apuntes como el que comentas: el caché de día y el smoking de noche.
En fin... Demodés del mundo, uníos!
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