martes, agosto 19, 2008

La paradoja de la creación digital y su conservación

Inicio un artículo entre lo "filosófico" y lo "chusístico". Puede que os aburra, puede que despierte vuestra curiosidad, puede que os haga pensar o alumbraros algún camino. Puede que os deje indiferentes. Sea cual sea el efecto que os produzca, yo necesito escribirlo; así que si lo lees, gracias, y si lo enriqueces con tus comentarios, más que gracias, enhorabuena por aportar. Si no lo lees estás en tu derecho. Como es una reflexión y mis reflexiones no tienen fin, procuraré servirla en cómodos fascículos.

La paradoja de la creación digital y su conservación
El movimiento pop surgió para realzar el valor de lo cotidiano o eso nos dijeron. Los coleccionistas dan valor económico (en ocasiones desorbitado) a lo que otros consideran y consideraríamos basura. Actualmente el nivel de creación, sea artística o de cualquier otra índole, es elevadísimo. Podría decirse que cualquiera puede crear, y de hecho, cualquiera puede. Los medios se han democratizado, sólo la creatividad y el momento marcan el origen de una creación. Las redes sociales se nutren de miles de millones de creaciones y excreciones, que de todo hay. Sin embargo, personalmente, hay una circunstancia que me inquieta o me causa una sensación de vivir peligrosamente la creación y consumo digital. La relación inversamente proporcional que existe entre la cantidad que se crea y la cantidad que se conserva. Cuanto más se crea, más consumimos, menos mantenemos. Y todo, paradójicamente, en una época que ha reducido los soportes, ha agilizado el almacenamiento y recuperación de información...

Nos decían en la facultad que el periódico de ayer sólo servía para envolver el pescado (fíjense si están atrasados en Ciencias de la Información que esta práctica quedó prohibida por el artículo 14.8 del RD 381 de 1984). La creación es efímera. Incluso hay artistas de lo efímero. Los escaparates son obras que duran unas semanas, como mucho, para desaparecer por siempre. Antaño y hoy todas las celebraciones tenían su arquitectura efímera. ¡Cuántos arcos del triunfo fueron ricamente levantados y desmontados después del desfile para no ser mostrados jamás!

Las "tecas" son esos lugares donde se catalogan y conservan, para su estudio y exposición, las creaciones humanas. Así tenemos las bibliotecas para los libros, las hemerotecas para los periódicos, las pinacotecas para los cuadros, archivos varios y pasillos y pasillos con decenas de documentos que son, sin lugar a dudas, nuestra memoria natural, la única manera que ha encontrado el ser humano de no tener que empezar de cero cada vez que nace un nuevo sujeto. Por eso nos parece tan difícil entender que antaño se cometiesen tales o cuales barbaridades. Hoy discutía sobre ello al respecto de la conquista de América, Bartolomé de las Casas y el esclavismo. Sí, es cierto, la media hora en coche desde Gijón a Oviedo da para mucho.

Internet y la creación digital han supuesto la entrada de miles de autores y de millones de consumidores. Si a Ortega su época le parecía que iba rápida, esta no podría mensurarla. Le faltaría toda la memoria natural desde 1929 a 2008, apenas 80 años, y todo un abismo.
Próxima entrega... "Necesidad de una "teca" digital" o "Nacimiento, difusión y muerte de una creación digital".
Sigo pensando...

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