Nos intentan vender una bonita moto: el chino (CCC y en Google). Lengua de la gran nación asiática. Ese país que está invirtiendo en África a la china callando y creciendo, creciendo. Más de un millón de personas, o potenciales consumidores, como "respetuosamente" llaman a los ciudadanos chinos en los círculos económicos occidentales.
No es que yo me oponga a la libre oferta de idiomas. Cada uno hace negocio con lo que quiere y la ley le permite. Sí me opongo a que me digan que el chino es el idioma del futuro (al menos del nuestro). No lo es por sentido práctico. China son mil millones de habitantes pero sólo son un estado. Los estados se relacionan con otros. Y los otros, queridos míos, hablan inglés y su orgullosa lengua propia. España, para hablar con cientos de naciones, usa el inglés. ¿Va a cambiar porque China crezca? No. China no deja de ser un estado más dentro de los cientos con los que España tiene que relacionarse diariamente. El chino sirve para hablar en China, meter negocio en China y sacar beneficio de esa tierra, pero como lengua universal tiene poco futuro. Y aún así, los chinos hablan inglés para los negocios, según Pablo Rovetta.
China exporta su idioma, no cabe duda, cada vez se estudia más, pero los chinos también estudian inglés. No pueden permitirse el lujo de esperar a que el mundo adopte su lengua para vender, comprar y seguir creciendo. China se incorpora al mercado.
Conclusión:
No estudies chino, perfecciona tu inglés. Cuando logres eso, dale al chino si quieres.
Sigo pensando...
Punto y (quizá) aparte
Hace 2 meses
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