La música es al anuncio lo que el chocolate al pan. La música ayuda, en ocasiones, a fijar el producto en la mente del consumidor. Digo en ocasiones porque muchas veces recordamos la canción, el anuncio incluso, pero no quién ha pagado todo ese recuerdo.
Las personas funcionamos, nos guste o no, a través de prejuicios, ideas previas, convencionalismos y cosas de esas que los psicólogos saben, estudian y cobran. Piensa en una nevera, piensa en un color, ¿qué beben las vacas? ¿leche? Así somos y así seguiremos siendo. Cómodos. Ahora piensa en una boda y si no eres un tío al que le guste la música barroca a tres cuerdas sobre pianola de obsidiana dirás: El canon de Pachelbel, el Ave maría de Schubert y la marcha nupcial del amigo Mendelsohn o Wagner. Y si no, las tararearás. Así somos y así seguiremos siendo. Típicos y rutinarios. Eso no es malo, es.
Ahora bien, si asociamos determinadas canciones a determinados estados de ánimo, situaciones, etc... es porque ese ritmo, esa armonía o la concatenación de las parábolas de Jesús en el desierto, nos producen una reacción química en el organismo y nos ponen a funcionar. Si queréis que alguien se motive, ponle la música de rocky. Y el tipo se creerá invencible. Si queréis que alguien se relaje, se despreocupe, incluso vuelva a sonreír, comienza a silbar "don't worry be happy" (funciona). Si quieres que te hostien ya sabes lo que debes cantar y dónde. La música es así, produce reacciones.
Y si una canción produce un estado de ánimo, ¿por qué no etiquetarlas? ¿Recuerdan la campaña de lanzamiento del Renault Clio iPod? 7.500 canciones para 7.500 estados de ánimo (petalos / insecto). A cada canción, una etiqueta, o varias.
Elegir canción, buscando un efecto, una reacción, dejando la clasificación a quien ya la ha escuchado y sentido, ¿no es útil?
Last.fm ofrece etiquetaje en sus canciones. Los usuarios pueden poner las etiquetas que quieran. Y, la verdad, creo que buscar canciones que inspiren sensaciones, emociones o estados de ánimo es un gran progreso a la hora de elegir tema para un anuncio. Ahora bien, a last.fm aún le queda un poquillo para ser útil como banco de canciones.
En definitiva, una página de música 2.0 para publicidad debería ofrecer:
- Clasificación por etiquetas de la canción o fragmento
- Búsqueda aditiva por etiquetas y categorías. Ejemplo de búsqueda: solidaridad+paz+infancia+esperanza, resultado: "Que canten los niños"
- posibilidad de subir canciones
- preescuchas y/o escuchas
- posibilidad de contratar los derechos de uso
- estadísticas
- Comentarios
- Historial de uso. Esta canción se ha usado en ... películas, musicales, anuncios, funerales, página web, documental... tantas veces.
- Y otras que no se me ocurren...
Es posible que todo esto ya exista, pero bueno, ahí queda para quien pueda interesarle. Lo que estoy seguro no existe es what's the name of that song? Una página donde personas como yo, amantes del tarareo podamos saber, de una vez por todas, qué narices silbamos o tarareamos. Hay un alemán por youtube intentando desarrollar la idea, pero con youtube no es suficiente a la vista de los resultados. Y es que... nadie busca preguntas.
Sigo pensando...
Punto y (quizá) aparte
Hace 2 meses
2 comentarios:
Respecto a lo de una web en la que la música se pudiera buscar por sensaciones, conocí hace unos meses: www.sound-archive.com
Se puede filtrar por género de música (reggae, lounge, corporate...), por instrumentos que aparecen (oboe, tuba...) y tiene un sintetizador para elegir diferentes niveles de 'felicidad', 'agresividad', 'complejidad'.
A mí me parece muy original.
Saludos!
La verdad que el sintetizador me parece una manera original y fácil de hacer la búsqueda por sensaciones. Mucho de esto, algo de esto otro y una pizca de aquello. Genial.
Gracias por tu comentario y el enlace.
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A ver si actualizo el contador de peines... ;)
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